Introducción
Por Octavio Déniz
La representación de la Muerte como un esqueleto que porta una guadaña es un símbolo de origen medieval, que posee también reminiscencias de la mitología griega.
Como recuerdo de las epidemias que asolaron Europa en el medievo, podemos ver, tanto en iglesias como en grabados, representaciones de la Muerte como un esqueleto. Una de las imágenes más icónicas es la Danza de la Muerte, que muestra a un esqueleto que lleva, bailando, a diversos personajes al otro mundo. Entre estos personajes hay tanto nobles como campesinos, reyes o papas (como veremos en el naipe número 13 del Tarot Rider-Waite).
Esta representación de la muerte y del carácter universal de la misma, que no respeta a nadie, se manifiesta en los últimos planos de la famosa película «El séptimo sello» de Ingmar Bergman.
Pero ¿de dónde procede la guadaña con la que se muestra a este personaje en el Tarot? Probablemente, estamos ante el recuerdo de Átropos, la más temible de las tres moiras. Éstas eran tres hilanderas que medían la longitud de la vida humana a través del tejido de un hilo. Átropos era la encargada de cortar el hilo de la vida mediante unas tijeras. Un acto fatal que ni siquiera los dioses más poderosos podían impedir.
Nieves Ríos nos habla de la Muerte en este corto relato, recordando que uno de sus significados es, precisamente, aquel que se relaciona con el final irremediable de algo.
La Muerte
Por Nieves Ríos
Ella sentía su abrazo, ese que reta a la enfermedad cuando ya no quedan fuerzas, pero las Almas siguen siendo una.
De pronto un escalofrío recorrió sus cuerpos invadiéndoles el Alma, haciéndose a su vez, parte de ella.
Es la hora, dijo La Muerte.
Vengo a liberaros del sufrimiento.
Con una serenidad casi insultante, ellos se miraron dando el último adiós a sus cuerpos y, sellando este, con un beso.
Entonces él miró a La Muerte y haciéndole un suave gesto, le indicó que ya podían partir.