Texto de: Rosa López (Seren Tarot)
Los Caballos en el Tarot nos hablan de la evolución o del ritmo en que se mueven los acontecimientos. El Caballo de copas nos dirá que las cosas se moverán con tranquilidad. El de bastos, que el movimiento se produce con energía y pasión. El de oros, que las cosas se moverán lentamente, paso a paso. Y el de espadas, que todo irá rápida y velozmente. También nos hablan de personas que van o que vienen con las características del palo que representan.
El Caballo de Bastos nos habla de personajes de fuego y nos dice que tenemos que actuar de manera ágil y dinámica, ya sea en cuestiones laborales o personales. Este arcano representa una fuerza creativa e innovadora. Nos dice que las cosas se mueven y avanzan positivamente a la vez que nos enseña que hay que aprender a tener confianza en un mismo y a ser decididos y activos.
Simbología. En la imagen, un caballero enfundado en una armadura (protección), está cabalgando de manera impetuosa encima de un caballo anaranjado (pasión, energía). Lo cubre un traje amarillo (inteligencia práctica) todo bordado con salamandras (símbolo del elemento fuego) que no se muerden la cola (planes que podrán no llegar a su término). En la cabeza, un penacho rojo (ideas apasionadas y enérgicas). Sus guantes nos pueden indicar que tiene mano izquierda para solucionar las situaciones que se presentan. En la mano derecha, un bastón florido (energía creativa). Al fondo de la imagen, unas montañas amarillas, altas y definidas (objetivos ambiciosos pero formulados con inteligencia).
El Caballo de Copas nos habla de personajes con características de agua y nos dice que tenemos que avanzar con tranquilidad y calma en aquellos aspectos emocionales que vivimos. Este arcano simboliza el amor, el romanticismo, la paz y la serenidad. Su energía nos impulsa a ser más sensibles, a mirar en nuestro interior y a valorar la belleza que nos rodea.
Simbología. En la imagen se ve un caballero encima de un caballo blanco (pureza de sentimientos) que se mueve lentamente (serenidad y seguridad). Esta enfundado en una armadura (protección) y lo cubre una túnica donde se ven peces y agua (emociones, sensibilidad). Su mano nos ofrece una copa (sentimientos, emociones, ayuda). En la cabeza y en los pies las alas de Hermes/Mercurio (noticias, oportunidades). Al fondo de la imagen, un río (emociones que fluyen) y unas montañas altas y próximas (objetivos inmediatos que pueden comportar alguna dificultad), donde se ven árboles y vegetación (creatividad). El suelo es de color amarillo (avanza sobre una base inteligente). Si juntamos la inteligencia y las emociones, tenemos inteligencia emocional, que es la que posee este caballero.
El Caballo de Espadas nos habla de personajes con características de aire y nos dice que tenemos que afrontar las situaciones que se nos presentan con energía y coraje. Este arcano a menudo refleja un momento en el que no hay nada que nos detenga a la vez que nos invita a ser lógicos, racionales, incisivos y valientes. Es una carta que habla de una persona directa, rebelde, valiente, atrevida, llena de ambiciones y enfocada en lograr sus objetivos.
Simbología. En la imagen se ve un caballero montado en un caballo blanco (nobleza) que esta enfundado en una armadura. En su cabeza, un casco con un penacho rojo (protección y pasión). Galopa con energía (circunstancia inmediata) por un suelo amarillo (inteligencia), y muestra en alto su espada (acción dinámica, activa, defensiva o al ataque). Las bridas del caballo tienen pájaros rojos (elementos de aire) y en los correajes se ven mariposas (capacidad de transmutación). En su traje se ven llamas de fuego. Le cubre una capa roja (energía y pasión). Al fondo, un cielo agitado, con nubes de tormenta a la altura de la cabeza (pensamientos rápidos e inquietos) y unos árboles agitados por el viento (agilidad mental). A pesar de tener el viento en contra, va decidido y valiente hacia su “conflicto”.
El Caballo de Oros nos habla de personajes con características de tierra. En una lectura nos dice que tenemos que ser meticulosos y tomar las decisiones oportunas con paciencia y cautela si es que queremos lograr nuestros objetivos. Este arcano nos invita a trabajar con la mayor eficiencia posible y a cuidar nuestros recursos para no malgastarlos.
Simbología. En la imagen, un caballero montado en un caballo negro (capacidad de concentración) que controla con unas bridas rojas (pasión). No está en movimiento, sino que está parado en un suelo que ha sido trabajado (ya ha realizado su tarea). Está enfundado en una armadura que tiene en el casco un penacho amarillo (protección inteligencia) y viste una túnica roja (energía y pasión). En su mano un guante (tacto para hacer las cosas), y está mostrándonos un oro (prosperidad) que él no mira. Su mirada está puesta más allá, en el futuro y no en lo que ya ha conseguido. El fondo amarillo de la carta nos indica la inteligencia práctica para resolver las situaciones que se presenten.