La gula la encontramos en el Nueve de Copas
Esta carta, en su aspecto negativo, representa indulgencia excesiva, hedonismo y la búsqueda de satisfacción a cualquier costo. Habla de placeres temporales que dejan un vacío. La gula no solo se relaciona con el deseo desmedido de comida, bebida o placeres físicos, va más allá de lo necesario. Entendiendo que cualquier forma de exceso que usamos para evadir nuestros problemas no nos beneficia.
La carta de la Templanza (XIV), una vez más, y como símbolo del equilibrio, nos invita a disfrutar de la vida con moderación, priorizando lo que realmente nos nutre. Practicar la templanza implica reconocer los límites y aprender a valorar lo esencial. Nos ayuda a moderar nuestros deseos y a disfrutar con equilibrio.
Podemos expiar este pecado, comiendo y bebiendo con moderación, evitando los excesos. Adoptar hábitos saludables y practicar el autocontrol. Reflexionar sobre los verdaderos motivos detrás de nuestros excesos.
